Amplifica un evento de unión por México

Juntos somos poderosos. El Amplifica México no trató de ser un evento tendencioso sino unificador, justo desde que el actor Diego Luna salió anoche al escenario del Pala­cio de los Deportes para dar un discurso de apertura que con­dujo el concierto.

“Es una noche para cele­brar que estamos unidos y juntos, para celebrar que nos podemos organizar; no hay que celebrar que ayudamos, no vale la pena festejar eso porque ayudar es lo que nos corresponde.

“Pero sí aceptar que jun­tos somos poderosísimos. Esta noche es un ejemplo de eso, una comunidad que se juntó y se puso de acuerdo. Todos es­tamos aquí para que los que lo necesiten sepan que no están solos, no se trata de reconstruir México, sino de construir el país en el que queremos vivir. Está en nuestras manos y hay que empezarlo a hacer desde hoy”, dijo el también director mexicano.

De Chile, pero ya más mexicana que nada, Mon La­ferte tuvo el encargo de po­ner música a esta jornada de conciencia, de unidad juve­nil, porque todos los presentes eran chavos que tienen en sus manos el destino de la nación, ya lo diría más adelante Café Tacvba.

Mientras Laferte cantó el siempre confiable cover a Se­lena Quintanilla Si una vez y la infaltable Tu falta de querer.

Después llegó un video de Natalia Lafourcade interpre­tando una canción en honor a México, y otro de Alfonso Cua­rón, promoviendo la iniciati­va de México Raíces. Banda de Turistas, desde Argentina, se sumó al encuentro musical con una rola.

Pero lo realmente bueno llegó con Café Tacvba. Rubén, Joselo, Quique y Meme tie­nen su espacio a la derecha del Dios del rock nacional, aunque puede que ellos sean una deidad, consecuencia de un minisismo con epicentro en el Domo de Cobre.

Porque fue impresionan­te, como siempre, ver a 25 mil personas saltando con Las flores, poniéndose muy “raza” con Chilanga Banda, de Jai­me López, y hasta ponerse un poco punk con La chica banda.

“Somos pueblo porque tenemos corazón, hagámo­nos pueblo; los países van a desaparecer y el corazón del pueblo siempre se quedará”, exclamó Albarrán antes de seguir con El baile y el salón.

En las pantallas se denun­ciaron actos de corrupción, exfuncionarios presos, como Javier Duarte; hubo una voz exclamando claridad y ver­dad, una voz juvenil que está harta de los crímenes y las tranzas de los políticos.

Hasta que salió Reyno con su set acústico de cinco rolas que dio paso a Kinky. Hasta el cierre de esta edición, aún fal­taba la participación de Zoé y Molotov.