Así comenzó una historia llamada RMX

Gabriel Altamirano   30/01/2017

Gabriel Altamirano

Tres años después de la última llamada; suena el teléfono, saluda… inmediatamente después:

-” ¿Trabajarías de nuevo conmigo? - preguntó él

- “¡Claro!” - dije yo, sin pensarlo

- “Voy en una semana a Guadalajara y nos vemos para platicar del proyecto” - dijo él

- “Me late, yo estoy puesto” - dije yo

Así comenzamos la historia de lo que después de 11 años sigue llamándose RMX.

Un vaivén de emociones; yo emprendía un nuevo negocio, pero la radio me atrae como miel a las abejas, como van las moscas a… bueno, ustedes entienden.

La propuesta estaba llena de ideas, de conceptos, de música, mucha música.

Los altos mandos querían dejarle el SUPER, de super stereo y llamarla SUPER RMX, porque no confiaban al 100% en el concepto radiofónico que se proponía y querían afianzarse a los 30 años de historia de la estación que moriría a la entrada de este nuevo proyecto; nosotros lo peleábamos para que se quedara únicamente RMX, de la misma forma en que peleábamos los equipos, presupuestos, los horarios y pensábamos en las voces que queríamos al aire. Fueron los radioescuchas quienes le quitaron el SUPER, ellos ya la llamaban RMX.

El camino se veía muy complicado, había que luchar contra todos, adentro y afuera. Adentro se vivía de todo, los gritos y sombrerazos, aplausos y felicitaciones de Gonzalo, el pushing a hacer más y más cada día.

Hace 11 años conocí mucha gente nueva, compañeros, algunos de ellos se convirtieron en amigos entrañables, radioescuchas, música. Aprendimos de todos y entre todos, algunos estaban renuentes, pero al final, uno a uno se fueron subiendo al barco.

Nunca dejaré de agradecer la confianza de Gonzalo para ser sus ojos, oídos y manos para lanzar este proyecto que aún, ahora desde afuera, lo sigo viendo con orgullo, porque fui parte, porque pusimos la primera piedra, porque fue una página en la historia de mi vida que aún recuerdo con cariño y que nos permitió avanzar a nuevos retos, a nuevas enseñanzas.

Gracias a todos los involucrados, a todos los que la construyeron con nosotros, a los que la siguen construyendo y a los que nos escuchaban en esa frecuencia. Felicidades por 11 años de mantener firme ese sueño.

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