Jim Carrey cambia las cámaras por los pinceles

“Cuando estaba intentando sanar un corazón roto lo decidí”.

Es difícil creer que este actor que ha dado vida a múltiples personajes de comedia, pueda llegar a experimentar una depresión, sin embargo, así fue.

Tras una dolorosa ruptura y el inesperado suicidio de su última pareja, Jim Carrey intentaba ‘pega’ su corazón roto y dañado.

Fue a través de la pintura, que el comediante de 55 años logro sacar los sentimientos negativos de su vida, y recuperar su paz emocional.

Este hobbie no sólo logró que el actor pudiera llevar a cabo un proceso de sanación emocional, sino que despertó en él una pasión desconocida hasta ese momento, la cual se remonta a su niñez, período en el cual él asegura que su vocación lo eligió.

Recientemente comenzó a circular en redes sociales un documental de esta faceta del estadounidense, donde se demuestra que Carrey tiene más talentos y habilidades que solo su humor.

Aquí te lo compartimos: